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Víctor Bravo, bailaor inquieto y de gran personalidad
Conoce a Víctor Bravo, uno de los artistas flamencos más prestigiados en la actualidad
Se dice que hay gente que ha aprendido antes a bailar que a andar, y Víctor Bravo es el claro ejemplo de ello. El bailaor sevillano comenzó sus estudios de Danza Clásica y Flamenca a la temprana edad de cuatro años. Hoy desde el Teatro Flamenco Madrid te contamos un poquito de la historia de uno de nuestros artistas.
Los inicios en el baile flamenco de Víctor Bravo
Víctor Bravo viene de una familia humilde y aficionada al flamenco. Acostumbrado a disfrutar de este arte desde antes de nacer como quién dice, es normal que el artista acabara convirtiéndose en uno de los bailaores más destacados del panorama artístico.
A los cuatro años inició sus estudios en la Escuela Superior de Danza de Matilde Coral hasta los quince años, momento en el que decide marchar al extranjero para trabajar y seguir formándose. Durante este tiempo, la inagotable inquietud y afán por investigar y aprender sobre nuevas técnicas y estilos le hicieron convertirse en una joven promesa del baile flamenco.
Los nuevos conocimientos obtenidos se pueden apreciar en su amplia forma de expresión y su madurez en la puesta en escena. Tras su regreso a España con diecisiete años, comienza a trabajar con directores españoles como solista y primer bailarín, aprendiendo la disciplina de grandes compañías. Entre sus grandes maestros encontramos a sevillanos como Matilde Coral, El Mimbre o Manolo Marín, y grandes directores como el Maestro Granero.
En su búsqueda por enriquecer sus códigos de expresión se traslada a Japón, donde comienza su etapa como coreógrafo y director. En estos años tiene la oportunidad de colaborar y compartir escenario con artistas como Israel Galván, Lola Greco, Alejandro Granados y El Torombo, entre otros.
Tras sus andaduras por el extranjero se asienta en Madrid y comienza una etapa gratificante profesionalmente como creador de piezas de danza y teatro, donde deja ver su estilo personal que ha ido forjando durante sus años de investigación. Actualmente dirige su propia compañía a la vez que descubre nuevos ritmos, movimientos y culturas.
Conociendo un poco más al bailaor Víctor Bravo
El bailaor Víctor Bravo destaca por su derroche de imaginación en cada coreografía. Al artista le gusta cuidar de cada detalle, desde el montaje, el vestuario, y todo elemento que esté presente en sus actuaciones.
Para él es imposible decantarse por un único palo del flamenco debido a la grandeza de este arte, el cual posee diferentes estilos y técnicas. Hay momentos en los que está centrado en la investigación de un palo y no sale de él. Por ello nos cuenta que, depende del momento que se encuentre y el clima que se crea, se decanta por un palo u otro. Un día puede estar enfocado en seguiriyas y al día siguiente en un palo del flamenco totalmente distinto.
Pero sin duda, lo que más valora de una actuación flamenca es que sea capaz de hacerle sentir vivo, llorar, reír, y llenarse de emociones. No es fan del arte limitado ni excesivo o desfasado. Cree en un equilibrio del lenguaje flamenco, pero sobre todo cree en la honestidad y la pureza de verdad, que el artista se muestre tal y como siente su arte.
El flamenco ha sido su compañero toda su vida. Le ha visto crecer y convertirse en un gran bailaor a la vez que él veía como el flamenco evolucionaba. Apuesta porque el flamenco es un arte vivo y en constante crecimiento. Un arte inmortal que se recrea, vuelve a sus orígenes y se mantiene clásico. Salvaje, único y con tanta riqueza que se le hizo imposible al bailaor enamorarse de él.
Para nosotros es un honor poder contar con su talento en nuestro espectáculo flamenco diario Emociones. Si no te quieres perder sus próximas actuaciones y de muchos artistas más, ven a visitarnos a Teatro Flamenco Madrid. Compra tus entradas en el siguiente enlace. ¡Nos vemos pronto!