Complementos que no pueden faltar en tu traje de flamenca

El traje de flamenca forma parte de la cultura y las costumbres andaluzas. Es todo un símbolo de tradición en las fiestas de esta representativa comunidad autónoma.

Esta prenda es todo un símbolo de estilo y poder, que exalta la belleza de toda mujer.

El traje de flamenca va acompañado de ciertos complementos que realzan aún más el esplendor de este vestido. Para estos, al igual que hay muchos tipos de vestidos de flamenca, existen muchos tipos de complementos, que se puedan adaptar a tu gusto y estilo, además de combinar con los colores del traje.

Estos complementos los podemos resumir principalmente en el mantoncillo, el broche, la flor y la peineta, elementos imprescindibles de tu look flamenco.

La flor y los tipos de peineta

Una de las partes más importantes del traje de flamenca es la flor. Las flores más populares son las rosas, aunque también se puede optar por claveles o ramilletes.

Cuando llevamos trajes de un color liso, lo ideal es llevar una flor del mismo color. Sin embargo, al llevar vestidos más suaves y sutiles, lo ideal es llevar una flor mucho más llamativa para que hagan diferentes contrastes entre sí, y así dar más vida a tu look de flamenca.

Respecto a las peinetas, podemos distinguir varios tipos. En primer lugar, las peinetas son más grandes y vistosas y se coloca sólo una. En segundo lugar, las peinas son más pequeñas y se colocan también solas. Sin embargo, los peinecillos al ser los más pequeños, se suelen colocar sujetando la flor y el recogido.

El mantoncillo

El mantoncillo es prácticamente un inseparable del vestido de flamenca.

Existen varias formas con mucho estilo para llevarlo: cruzados, picos hacia delante, doble unido en la cintura, en pico, cinturón y doble mantoncillo o en V abierta. De cualquiera de estas maneras, podrás lucir de la forma más estilosa el traje.

Sin embargo, también hay cosas que no tenemos que hacer a la hora de llevar este complemento. La forma de llevar el mantoncillo dependerá, exclusivamente, de la forma de nuestro traje. Si el vestido no tiene escote en la espalda, la manera correcta sería llevarlo de la forma tradicional o cruzado por delante. Por el contrario, si este luce un bonito escote es importante adaptar el mantón para no quitarle protagonismo a la espada.

También hay que mencionar la gran variedad de mantoncillos que hay, como los lisos monocolor, los de tejido de plumeti, los mantoncillos estampados y los bordados.

Los pendientes

En cuanto a los pendientes, suelen ser grandes y vistosos. Sin embargo, tiene que existir un equilibrio entre estos, la flor y la peineta, para que no se vea excesivo o recargado.

Los más clásicos son los de filigrana de carey, los aros o los corales.

El broche

Otro de los elementos que hay que lucir es el broche. Este lo elegiremos según sean los demás complementos, para que no rompa la armonía del look.

La función del broche es sujetar el mantón y así abrocharlo. Sin embargo, hay flamencas que se ponen otro broche también detrás, para sostener el escote.

Si quieres disfrutar de trajes de flamenca llevados con estilo y movidos con mucho arte, no puedes perderte nuestro espectáculo flamenco. ¡Te esperamos en Teatro Flamenco Madrid!